Debido a la resistencia de los ciudadanos de Ensdorf (ver imagen) , fue suspensa a construcción de una usina de carbón mineral de 1.600 MW en aquella ciudad del estado alemán de Saarland. El conglomerado energético RWE declaro el 26 de noviembre pasado, que no construirá la unidad contra a voluntad de los habitantes locales. Estos refutaron el proyecto en un plebiscito, por más de 70%. La empresa RWE había acordado con el gobierno local una participación mínima del 66 % (sumamente alta) para dar lugar a la decisión de sus ciudadanos, sin embargo más del 70 % de la población participó del plebiscito.
El Servicio Alemán para el Medio Ambiente (DUH) y el Partido Verde apoyaron la decisión.
La RWE, a través de su Vicepresidente, Jürgen Grossmann, lamentó profundamente que este "importante proyecto" no pueda ser realizado en Ensdorf. Alemania precisa de "usinas nuevas, altamente modernas e limpias, para estabilizar los precios, aumentar la competitividad y fortalecer la protección al clima".
Pero la empresa no consiguió convencer a los ciudadanos de las ventajas del proyecto y tuvieron que retirar el proyecto.
